Pedro Sánchez es el presidente del Gobierno que más ministerios ha creado de los últimos cuatro gobiernos, así lo reflejan los datos de un curioso y completo informe de la Fundación Civismo. Mariano Rajoy tuvo 18 ministerios en total y Sánchez aumentó la cifra hasta los 31, un 72% más. Esta cifra da pie a la conclusión que destaca el informe de que los gobiernos del PP tienen menos ministerios que los del PSOE para llevar a cabo las funciones del gobierno. Esta desproporción es todavía mayor si se tiene en cuenta que Rajoy estuvo en el Gobierno 17 meses más que Sánchez.
El informe recuerda que cada ministerio supone un enorme aumento de gasto público debido a los recursos materiales y humanos que implican. La Fundación Civismo han analizado si dichos departamentos tenían sentido ya que si no son precisos, a parte de suponer una pérdida de dinero, pueden resultar perjudiciales por inventarse funciones que complican la vida de los ciudadanos.
En este aspecto, según los datos recabados por el estudio, Pedro Sánchez, en el mejor de los casos, tiene un 90% de ministerios con sentido y en el peor un 61%, mientras que Rajoy, tiene un 100% en el mejor caso y un 83% en el peor caso. Lo mismo sucede si lo comparamos con los dos anteriores presidentes, Aznar y Zapatero. Así, Sánchez es el presidente del Gobierno que más dinero público ha gastado en ministerios y el que más ministerios inútiles ha tenido de los últimos cuatro presidentes.
El PSOE adapta el ministerio al ministro
¿Y por qué tanto contraste a la hora de definir los ministerios? Pues no se basa en la alta preparación y formación de los ministros, ya que muchos de estos nuevos ministerios, como el de Igualdad, están dirigidos por cargos como Irene Montero, que carecen de la formación académica y profesional apropiadas.
En un análisis global, el estudio señala que el PP tiene una política con resultados más razonables ya que sus ministros tienen una formación más propia al ministerio para el que son nombrados, al contrario que ocurre en el PSOE que se encargan de adaptar el ministerio al ministro. Teniendo en cuenta los trabajos previos realizados antes de ser ministro, el gobierno de Sánchez ha sido más proclive a escoger a personas de dentro del partido que a personas que tuviesen más experiencia.
En términos de titulaciones académicas, los ministros de Pedro Sánchez están un 16% menos capacitados para sus funciones que los de Rajoy, lo cual se refleja en lo ocurrido durante la pandemia del covid-19, en la cual, Pedro Sánchez tenía en Sanidad a un ministro licenciado en filosofía y con un máster en ADE, mientras que en Hacienda tenía a una licenciada en medicina y cirugía.
Menos ministerios y con mayor justificación
El carácter superfluo de algunos ministerios del PSOE queda demostrado por el hecho de que no existan en otros países. El estudio determina una conclusión clara: en lo que respecta a ministerios, el PP lo ha hecho mejor al tener menos y con mayor justificación. Esto también se refleja en la duración de los ministros del PP (55%) en el cargo que también es mayor que la del PSOE (48%). El ministro que menos ha durado en el gobierno, lo nombró Sánchez y estuvo menos de 6 días. Fue Màxim Huerta.
En cuanto a la cantidad de ministros, Sánchez ha contado con 42, una cifra que supera con creces a los 24 ministros que formaron parte del gobierno de Rajoy, lo cual supone un 75% más. Con una diferencia menor, entre Zapatero y Aznar ocurrió lo mismo.
El PSOE destina más recursos en tener más ministros, los adaptan peor al puesto, tienen que rotarlos con cierta frecuencia, y duran menos tiempo en el cargo. Todo esto se combina con la nula capacidad de llevar a cabo la agenda del gobierno debido a la descoordinación, algo por lo que sufre todo el país y no solamente el votante del PSOE.
El informe es tajante: los gobiernos del PSOE han tenido una línea más política que la del PP a la hora de formar sus gobiernos. En el caso de Sánchez, sus ministerios han sido nombrados más para poder pactar la presidencia que por su competencia, han tenido peor justificación y sentido, han tenido más cantidad de ministros, han durado menos, tenían peor preparación a sus puestos de trabajo y menos experiencia profesional que los del PP.
