Después de que se conociera que el Partido Socialista hispano votará en contra del intento de investidura de Mariano Rajoy, actualmente presidente en funciones del gobierno de España, se elevaron las posibilidades de que Madrid se encamine a las terceras elecciones generales en un año.
Y pese a que sigue reinando la incertidumbre y a que se han reducido las perspectivas de crecimiento del producto hispano, de darse este escenario, analistas anticipan que el principal beneficiado sería el Partido Popular de Rajoy, que lograría capitalizar el cansancio de la gente y posicionarse como el único partido político español capaz de conseguir mayorías.
“No se entiende muy bien la estrategia de Pedro Sánchez y dentro de su partido hay mucho malestar. Hay gobernadores de provincias y regiones diciendo que no tiene que bloquear (el nuevo intento de) la formación de gobierno. La alternativa son las terceras elecciones”, dijo el director ejecutivo del think tank Civismo, Diego Sánchez de la Cruz, explicando que “en España se ha roto la ilusión de los nuevos partidos que venían a cambiar el establishment”.
“Las nuevas elecciones serían en Navidad (25 de diciembre). El nivel de hartazgo es tremendo. Esto fortalece al Partido Popular como el partido que fue capaz de ganar las elecciones en diciembre (del año pasado), capaz de ganarlas en junio con mayor diferencia y capaz de volver a ganarlas en diciembre de este año. Los votantes del centro a la derecha irán al PP. Ya se vio en junio que Ciudadanos perdió votantes desde diciembre”, acotó.
El no de Sánchez. Ayer el líder de los socialistas españoles dijo que su partido no apoyará la reelección de Rajoy, tras reunirse ambos por última vez antes de que se vote mañana la eventual formación de un nuevo gobierno en el Parlamento.
El presidente PSOE, Pedro Sánchez, tiene la llave para desbloquear la situación de estancamiento político que dura ya ocho meses, ya que Rajoy no tiene la mayoría necesaria para formar gobierno, por lo que tendría que abstenerse.
Así, el PP está a seis escaños de la mayoría absoluta de 176 que necesita en la votación, ya que cuenta con sus 137 diputados, los 32 de los Ciudadanos y uno del pequeño partido Coalición Canaria.
Sánchez afirmó que Rajoy debe intentar obtener el apoyo de varios partidos regionales pequeños para lograr la investidura presidencial.
“Ha sido una reunión perfectamente prescindible”, comentó Sánchez a los reporteros el lunes. “La responsabilidad del PP es la de intentar articular una mayoría suficiente que le permita gobernar y para eso no puede contar con el PSOE”, señaló.
Si Rajoy pierde la votación de mañana, se celebrará otra el viernes en la que bastaría una mayoría simple -en la que sólo necesitaría reunir más sufragios a favor que en contra- para permitirle formar gobierno. Si pierde también esta segunda votación, se abriría una ventana de dos meses para intentar formar gobierno, y si nadie lo consigue, se convocarían las nuevas elecciones.
Encuestas muestran que la mayoría de los españoles prefiere que el PSOE permita la formación de un gobierno encabezado por Rajoy.
En cuanto a la economía, pese a que la creación de empleos se ha mantenido, se ha reducido la expectativa de expansión del PIB de 3,5% a 3%, explicó el CEO de Civismo. “Para 2017 se ve el efecto de la parálisis. Se espera una caída del crecimiento del PIB de 3% a 2,2%, perdemos casi un tercio”, señaló.