¿Conoce aquello del timo de la estampita? Dos estafadores convencen a un‘primo’ de que gastando una pequeña cantidad de dinero podrá conseguir unos ‘papelitos’ (billetes) de un presunto tonto, sin ningún esfuerzo.Una versión más moderna es la teoría de que gastando más, los gobiernos podrán conseguir una recaudación suficiente como para compensar el desembolso extra y que los ajustes presupuestarios son contraproducentes si lo que se pretende es reducir el déficit. La idea se basa en que, si los gobiernos gastan más, trasladan ese dinero a los ciudadanos, que también consumen más y pagan más impuestos. La práctica demuestra que esto no es cierto enpaíses como el nuestro.
Así, por ejemplo,Canarias aumentó sus gastos corrientes un 0,21% en 2013 respecto al año anterior y recaudó un 1,98% más, mientras que Baleares recortó en ese mismo año un 16,11% su gasto y su recaudación crecieron un 3,42%. La tendencia de ambas variables muestra que, por cada euro que crecen o se reducen los gastos, los ingresos varían, exactamente, cero. La estimulación de la demand mediante gasto público puede ser válida en el caso de grandes economías, como la de Estados Unidos. Este colosal
país crea el25%de la riqueza mundial. Por el contrario,no es extrapolable a España, que apenas genera el 2%, y mucho menos a las comunidades, donde aplicarla sería un suicidio económico. Cuanto más pequeña sea una región, mayor será la parte de ese supuesto estímulo que los ciudadanos dedicarán a comprar bienes fuera.
En España,nos encontramos con un grupo de comunidades que fueron capaces de rebajar significativamente sus gastos por encima de la media, y no por ello recaudaronmenos: a la ya citada Baleares, se sumanMadrid (que redujo sus gastos un 15,61% en 2013), Cantabria (12,62%), Castilla-La Mancha (12,37%), Comunidad Valenciana (9,06%),Asturias (8,34%) y Aragón (7,92%).De estas seis regiones, solo en una, la Comunidad de Madrid, cayeron también los ingresos, un 5,82%, mientras que en el resto aumentaron hasta un 4,13%, en el caso de Cantabria.
El resto de las comunidades, en cambio, redujeron menos sus gastos o incluso los aumentaron presentando una evolución más heterogénea de la recaudación. Así, los gastos descendieron un 4,39% en La Rioja, un 3,95% en el País Vasco, un 3,66% en Andalucía, un 3,59% en Extremadura, un 2,91% en Cataluña, un 2,62% en Murcia, un 1,8% en Castilla y León y un1,63% en Galicia. Por el contrario, el gasto público subió,no solo en el caso ya citado de Canarias (0,21%), sino también en Navarra. En referencia a estas comunidades, los ingresos cayeron en: PaísVasco (un 7,04%), Cataluña (2,39%), Castilla y León (2,05%) y Navarra (0,37%), a pesar de que en esta última el gasto público se mantuvo.
Por tanto, es evidente que el gasto no genera buenos resultados porque, cuando se deja a los políticos decidir por nosotros, prefieren mantener una televisión pública que promocione sus actos, aunque sea a costa de reducir inversiones productivas. Por eso, nuestros gobernantes deberían trabajar en cosas queno cuestan un euro a las arcas públicas. Por ejemplo, mejorar la seguridad jurídica, eliminar las barreras burocráticas o acabar con una legislación excesivamente garantista que despilfarra tanto capital intelectual como físico.