El escritor Mario Vargas Llosa ha sido galardonado este lunes por el Patronato de think tank Civismo con el Premio Sociedad Civil 2018 por su compromiso con la libertad “a lo largo de su trayectoria vital” y por su inestimable “aportación desde el ámbito literario e intelectual”.
En un acto celebrado en el Ateneo de Madrid con la asistencia de más de 300 invitados, el galardonado ha abogado por la defensa de los valores democráticos y el fortalecimiento de la sociedad civil.
La encargada de entregar la distinción ha sido la anterior galardonada, la portavoz de la plataforma Libres e Iguales, Cayetana Álvarez de Toledo. En su discurso, ésta ha destacado los valores de la Revolución Francesa que Vargas Llosa encarna y ha subrayado que por encima de la libertad, la igualdad, e incluso la literatura, la palabra que mejor define al Premio Nobel es la de “fraterno”, “por su disposición intelectual y moral”.
LIBERTAD, LIBERALISMO Y TRANSICIÓN ESPAÑOLA
El escritor ha rememorado la Barcelona que se encontró cuando llegó a España en los años 70 y que el nacionalismo ha transformado hasta destruir “la tradición de apertura y la vocación universal” de la capital catalana. Además, Vargas Llosa ha instado a no renegar de la Transición Española, que según el novelista, ha traído “un extraordinario progreso al país”.
Por otra parte, ha hecho mención al liberalismo, que a su parecer, se trata de uno de los conceptos más “tergiversados” hasta el punto de considerarse “un insulto no sólo político, sino moral”.
“La libertad es lo mejor que nos ha pasado”, ha asegurado Vargas Llosa mencionando a Cervantes, para subrayar a continuación que es con la que se enriquece más la vida, inseparable de la esencia de la civilización.
Finalmente, el escritor ha recordado que de joven no creía en la libertad y que fue en un viaje a Cuba donde se dio cuenta, según sus palabras, de las deficiencias del socialismo después de que Fidel Castro le “impresionara” pero no le “convenciera”.