Las prestaciones por ERTE tienen un coste de 3.450 millones de euros al mes si se toma como referencia el dato de que, actualmente, hasta 3,4 millones de trabajadores se han acogido a este mecanismo, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Así lo señala un informe de Fundación Civismo en el que, sin embargo, se apunta que existen 600.000
solicitudes más que todavía no ha dado tiempo a tramitar. En caso de que se contabilizaran, y teniendo en cuenta que la prestación media que cobra un desempleado en España asciende a 852 euros, las prestaciones para esos 4 millones de afectados por un ERTE se cifrarían en 4.600 millones de euros mensuales.
Por otro lado, como indican Francisco Coll y José Francisco López, autores del estudio, muchos de los parados actuales, y que lleven mucho tiempo trabajando, recibirán una prestación mayor, incrementándose así su coste promedio. Si a ello se suma que existe la posibilidad de percibirla sin la necesidad de haber llegado al mínimo de cotización, la cuantía podría elevarse entonces hasta más de 5.000 millones de euros mensuales. De este modo, el coste de los ERTE alcanzaría un valor relativo aproximado del 0,3% del PIB. Un cargo que queda reflejado en el gasto en prestaciones
por desempleo, el cual se ha incrementado un 207,15%, mientras que las solicitudes lo han hecho un 136,56%.