Los ciudadanos tendrán que trabajar seis días más para cumplir con Hacienda, en base al informe de think tank Civismo.
La subida del IVA, que entra en vigor este sábado, costará 369 euros al año al trabajador medio, que pagará un 20,79% más por este tributo, según un estudio elaborado por ‘think tank Civismo’, que indica que los ciudadanos tendrán que trabajar seis días más para cumplir con Hacienda. El tipo general de IVA pasa desde este sábado del 18% al 21% y el tipo reducido se elevará desde el 8% al 10%, tras la subida del impuesto aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy, que entra en vigor este sábado, 1 de septiembre. El estudio de la organización señala, que este aumento del IVA, «reducirá la renta disponible de los ciudadanos más que la subida del IVA del Gobierno de Zapatero (192 euros) y el alza del IRPF del Gobierno de Rajoy (137 euros) juntas». En este sentido, ‘think tank Civismo’ destaca que la subida del IVA afectará de forma distinta a los trabajadores según el nivel de ingresos. Así, según el estudio, a los mileuristas «la subida del IVA les costará 224 euros; mientras que quienes tengan un nivel de ingresos de 60.000 euros pagarán 833 euros más». En este último caso, subraya el informe, pagarán un 22,41 por ciento más de IVA, «ya que la mayor parte de su consumo son bienes de tipo alto». En cambio, serán las rentas bajas quienes «pierdan una mayor parte de su poder adquisitivo relativo». Para la jefa de Investigación de ‘think tank Civismo’, Cristina Berechet, esta mayor tributación «no va a servir para recaudar más, ya que restringirá el consumo y probablemente aumentará el fraude». «La subida del IVA es incompatible con unos impuestos tan altos al trabajo», apunta Berechet, quien recuerda que «las recomendaciones de la UE pasan por abaratar las cotizaciones a la Seguridad Social, de forma que se cree empleo, y compensar la caída de la recaudación con una subida de los impuestos al consumo». Por el contrario, lamenta que las medidas del Gobierno del PP «van a colapsar la actividad económica, porque la reducción de cotizaciones prevista llega tarde y es pequeña, y no supondrá un incentivo a la contratación«.