El economista y asesor de Civismo, Javier Santacruz, es el autor del último informe sobre el día de la liberación fiscal.
– ¿Qué es lo que motiva la destacada posición que ocupa La Rioja en el estudio?
– Obedece a varias razones. Por un lado, a que el efecto que tiene el IRPF sobre los contribuyentes riojanos es menor que en el resto de España, particularmente en los primeros tramos de renta (hasta 35 años). En el caso de las rentas que están por encima, La Rioja no es de las que tiene los menores impuestos como Madrid y el País Vasco, es cierto, pero aún así está por debajo de la media nacional. Otros factores que contribuyen a ese buen posicionamiento de la comunidad es la ausencia de impuestos autonómicos que afecten a los contribuyentes de rentas medias y la menor incidencia del IBI dentro de los impuestos municipales.
–Además, y por primera vez desde el 2013, el esfuerzo fiscal que deben realizar los riojanos para saldar sus cuentas con el fisco es menor al que tienen que hacer vascos y navarros, en teoría beneficiados por sus regímenes forales.
–Así es. Lo que ha ocurrido con Navarra es que en la última reforma aplicó unas modificaciones que benefician mucho a las rentas más bajas, pero a partir de los 35.000 euros, las rentas medias, la subida fiscal es muy grande. De hecho no tiene precedentes en los últimos años. Y en el caso del País Vasco, aunque en los tramos bajos del IRPF tienen bastantes ventajas fiscales, en el resto de los tributos (impuestos municipales y autonómicos) la presión fiscal es más alta que en el resto de España.