Los castellanos y leoneses celebran mañana, 28 de junio, el ‘día de la liberación fiscal’. O lo que es lo mismo, la jornada a partir de la cual su sueldo ya no se dedica íntegramente a pagar impuestos. En total, los contribuyentes de la Comunidad habrán necesitado 179 jornadas de su salario a cumplir con el fisco, en cualquiera de las vertientes: cotizaciones sociales, IRPF, IVA, IBI, impuestos especiales… De esta forma, los castellanos y leoneses dispondrán de 186 días de sueldo ‘duty free’ -libre de impuestos- hasta el próximo año, una vez terminada su deuda con Hacienda. Así lo asegura el informe de Think Tank Civismo, que sitúa a la región como la quinta de España que menos días de trabajo destina a pagar sus impuestos, solo superada por Ceuta y Melilla (175 días), La Rioja (177), y Canarias y Murcia (178). Por el contrario, Cataluña (186 jornadas), Cantabria (184) y Castilla-La Mancha (182), son las tres autonomías que más tiempo necesitan para pagar sus impuestos.
A pesar de esto, según el estudio, el ‘día de la liberación fiscal’ llega un día más tarde que la media nacional, que finalizó de pagar sus impuestos hoy, 27 de junio.
RANGO FISCAL INTERMEDIO
El documento de este lobby asegura que «no se han verificado cambios significativos en los principales impuestos de Castilla y León», por lo que el ‘día de la liberación fiscal’ llega en la misma fecha que en 2018, el 28 de junio. En este sentido, sostienen que las familias de la Comunidad se mantienen en un «rango intermedio» de presión fiscal frente al resto de comunidades de España.
Así, detallan que los más jóvenes afrontan una tributación efectiva por IRPF equivalente a la media nacional y al tipo marginal correspondiente a su nivel de renta, mientras que quienes se encuentran en su edad laboral adulta (entre los 45 y los 64 años) pagan un punto menos que en la Comunidad de Madrid, algo que, para Civismo, supone un ahorro fiscal importante que las familias emplean en mejorar su renta disponible, su consumo y su ahorro.
DISTRIBUCIÓN POR IMPUESTOS
Las cifras que maneja el lobby señalan a las cotizaciones sociales como las que mayor factura pasan a los contribuyentes, y suponen, de media, 103 jornadas de salario. El pago del IRPF, por el contrario, precisó de 34 días, uno menos que en 2018. El resto de tributos permanecen inalterables en cuanto a número de jornadas: 25 para el IVA; 11 para Impuestos Especiales; y seis más por la categoría de Otros, que incluye el IBI, Patrimonio, Sucesiones o Matriculación.