Desventaja fiscal foral
24 de noviembre de 2015
Por admin
Principales conclusiones

(i) La reforma fiscal de Navarra sube el IRPF a todos las rentas brutas de más de 19.500 euros

(ii) Los contribuyentes con unos ingresos brutos de 62.740 euros serán los que sufrirán el mayor incremento porcentual, ya que pagarán un 7% más de impuestos en 2016, el equivalente a 1.250 euros.

(iii) Independientemente del nivel de renta, los contribuyentes navarros pagarán más en concepto de IRPF que los residentes del País Vasco, La Rioja o Madrid.

(iv) La no reforma fiscal para las rentas más bajas hará que un mileurista tenga que pagar en 2016 hasta 436 euros más por el Impuesto sobre la Renta en Navarra que en Madrid.

(v) Tener hijos en Navarra supone un recargo fiscal frente a Madrid que va desde el 4,8% hasta el 126%.

(vi) Con una renta por debajo de 16.000 euros brutos y dos hijos, en Navarra se pagan hasta 500 euros más en concepto de IRPF que en Madrid.

(vii) La modificación del mínimo exento del Impuesto sobre el Patrimonio se puede traducir en una caída del PIB y una contracción salarial de hasta un punto porcentual y una reducción del stock de capital de hasta 3 puntos porcentuales.

Análisis

El régimen foral ha permitido hasta ahora a los contribuyentes navarros beneficiarse de unos impuestos al trabajo más reducidos que a los del resto de comunidades autónomas. Además, junto con la estructura productiva, el marco fiscal ha favorecido al conjunto de la economía navarra, lo cual se ha traducido en una tasa de paro muy reducida y un nivel del Producto Interior Bruto superior tanto a la media europea como a la española.

El informe Un marco fiscal para el empleo, infiere que el paro en España no es consecuencia de la crisis económica, sino que nuestro país siempre ha tenido un desempleo superior a la media de la UE. Esta diferencia se debe a problemas estructurales del mercado laboral y a la elevada fiscalidad del trabajo. Sin embargo, la tasa de paro en Navarra siempre ha sido entre un 30 y un 40% inferior a la media española y se halla por debajo también de la europea. No obstante, a partir del año 2009, las cifras de desempleo en Navarra se disparan, manteniéndose por encima de la media de la UE, a pesar de la ligera recuperación económica.

Para reducir el paro y activar el consumo, un informe de la Comisión Europea (Taxation Paper No 56., European Commission 2015) recomienda aminorar los impuestos al trabajo. Aparte del IRPF, las rentas del trabajo en Navarra y en España también cotizan a la Seguridad Social. No obstante, es el Impuesto sobre la Renta el elemento que marca la diferencia, y no las cotizaciones, que son las mismas.

Gráfico 1. Evolución de la tasa de paro: 1993-2014

Fuente: Eurostat
El Impuesto sobre la Renta en Navarra

Como es bien sabido, Navarra tiene su propio régimen foral, lo cual le permite legislar sobre el 100% del Impuesto sobre la Renta, y no sólo sobre el 50%, como es el caso de las comunidades autónomas de régimen común. Hasta ahora, este modelo de financiación ha constituido una ventaja competitiva para Navarra frente a otras regiones. Y, sin embargo, este mismo modelo es el que ahora impide a los contribuyentes navarros beneficiarse de la rebaja fiscal implementada por el Gobierno central. Por ello, es importante conocer cuál será la posición de los contribuyentes navarros frente a los de las demás comunidades autónomas tras la reforma tributaria propuesta por el Gobierno de Navarra.

Los tipos impositivos

Tras la reforma, el tipo máximo en Navarra se elevará hasta el 52%, siendo el más alto de todas las comunidades autónomas, incluso por encima del 49% aplicado en País Vasco. Es más, el tipo impositivo máximo para la media de los países de la UE-28 se sitúa en el 39,4%, 12,6 puntos por debajo del máximo que se aplicará en 2016 en Navarra. Este tipo impositivo tan elevado no sólo afecta a los contribuyentes que ya residen en Navarra, sino que va a representar una barrera de entrada para las personas altamente cualificadas. Además, tarde o temprano será también motivo de emigración fiscal hacia comunidades autónomas con regímenes fiscales más favorables. Navarra pasará de ser la comunidad autónoma que por su sistema fiscal atraía talento y rentas más altas a ser exportadora de los ciudadanos más cualificados y de contribuyentes. No hay que olvidar que las rentas en Navarra siempre han sido superiores a la media española.

¿Cómo afectará la reforma fiscal a los diferentes niveles de renta?

La reforma fiscal tiene efecto nulo a casi nulo (un ahorro de 5 euros al año) sobre las rentas de menos de 19.500 euros brutos. Por el contrario, a partir de ese nivel todos los contribuyentes se verán afectados por la subida impositiva. En 2016, todos aquellos con sueldos brutos superiores a 19.500 euros pagarán en concepto de IRPF entre 1 y 2.700 euros más que en el 2015.

En concreto, para una renta media de 24.400 euros, la reforma fiscal supondrá una subida de 50 euros en el impuesto sobre la renta. Por su parte, las rentas de 47.700 euros verán incrementado su esfuerzo fiscal en casi 700 euros. No obstante, son los contribuyentes con unos ingresos brutos de 62.740 euros los que sufrirán el mayor aumento porcentual, ya que pagarán un 7% más de impuestos en 2016, el equivalente a 1.250 euros.

Tabla 1. Impuesto sobre la Renta en Navarra: 2014-2016

Fuente: Elaboración propia

Como se puede observar, estos datos distan mucho de los presentados en rueda de prensa por el Gobierno de Navarra sobre el impacto de la reforma fiscal y las cantidades a pagar por IRPF en el 2016 y en los dos años precedentes.

Resulta importante precisar que los datos presentados en este apartado se han calculado para una persona soltera, sin hijos u otras cargas familiares, que tenga derecho a la deducción por trabajo y aplicando la legislación fiscal vigente en los años correspondientes. Navarra frente a La Rioja, País Vasco y Madrid Independientemente del nivel de renta, los contribuyentes navarros pagarán más en concepto de IRPF que los residentes del País Vasco, La Rioja o Madrid.

Tabla 2. El Impuesto sobre la Renta en Navarra, País Vasco, La Rioja y Madrid en 2016

Fuente: Elaboración propia

Aunque no se les vaya a subir el impuesto a los contribuyentes navarros que cobren menos de 16.000 euros brutos al año, ellos serán los más perjudicados frente a los de las demás comunidades autónomas, ya que pagan hasta un 49% más por concepto de IRPF que en Madrid o La Rioja.

La reforma estatal del IRPF y las bajadas autonómicas han beneficiado a las rentas más bajas de las comunidades autónomas de régimen común, lo cual se ha traducido en que un mileurista de Madrid o La Rioja (sueldo bruto anual de 15.500 euros) disfrute en 2016 de 436 euros más de renta disponible que un mileurista navarro.

A todos los niveles, los contribuyentes de La Rioja, País Vasco y Madrid tienen una mayor renta disponible gracias a un mejor trato fiscal. Con unos ingresos brutos de 19.500, 47.741 o 77.747 euros, de las cuatro comunidades autónomas analizadas, los contribuyentes tendrán una mayor renta disponible en País Vasco. En cambio, los contribuyentes con ingresos de 24.400, 32.034, o por encima de 102.748 euros, tendrán una mayor renta disponible, de hasta 2.895 euros (sueldo bruto de 127.748), si hacen su declaración en Madrid. Es importante destacar que una renta media de 24.400 euros pagará, en 2016, 218 euros más en el Impuesto sobre la Renta en Navarra en comparación con Madrid.

¿Dónde compensa tener hijos?

Tener hijos en Madrid, La Rioja o País Vasco desgrava fiscalmente más que tenerlos en Navarra. Con una renta por debajo de 16.000 euros brutos y dos hijos, en Navarra se pagan en concepto de IRPF hasta 500 euros extra (un 126% más) que en Madrid. De hecho, independientemente del tramo de renta, tener hijos implica contar con una mayor renta disponible en cualquiera de las tres comunidades autónomas analizadas que en Navarra.

Con un sueldo bruto de 19.500, o entre 32.034 y 77.748 euros y dos hijos a cargo, de las cuatro comunidades autónomas estudiadas, los contribuyentes tendrán una mayor renta disponible en País Vasco: desde 365 euros hasta 1.866. En cambio, los contribuyentes con un sueldo bruto de 24.400 euros y aquellos que ganen más de 102.748 tendrán una mayor renta disponible, de hasta 3.000 euros (400 en el caso de un sueldo medio), si residen en Madrid.

Por lo tanto, tener hijos en Navarra supone un recargo fiscal frente a Madrid que va desde un 4,8% hasta el 126%. Esto se debe en parte a que la reforma fiscal estatal que entró en vigor en enero de 2015 subió los mínimos familiares y personales, haciendo más llevadero tener hijos, lo cual se ha traducido en mayores beneficios para las rentas más bajas. Además, también algunas CCAA han reformado los mínimos personales y familiares, haciendo que la suma de los dos (el tramo estatal y autonómico) beneficie a los contribuyentes de las comunidades de régimen común.

Tabla 3. La fiscalidad de las familias en Navarra, País Vasco, La Rioja y Madrid en 2016

Fuente: Elaboración propia
Más subidas impositivas

La reforma fiscal no solo prevé subir el Impuesto sobre la Renta, sino también otros impuestos, como el de patrimonio o el que grava los hidrocarburos. Llama la atención sin embargo que se quiera hacer un Impuesto sobre la Renta más progresivo y que, al mismo tiempo, la recaudación prevista a través del impuesto sobre hidrocarburos represente la mitad de la recaudación por IRPF.

Como es bien sabido, el impuesto a los hidrocarburos es un impuesto sobre el consumo y, por lo tanto, no es progresivo, lo cual afecta en una proporción mayor a las rentas más bajas. No deja de ser sorprendente esta medida, dado que las comunidades autónomas del entorno de Navarra, como La Rioja o las Diputaciones Vascas, no lo aplican. Esto se traducirá en una fuga de clientes a otras regiones fronterizas.

Por otro lado, el mínimo exento fijado en el impuesto sobre el patrimonio será el más bajo de todas las comunidades autónomas. Además, no hay que olvidar que en La Rioja existe una bonificación en la cuota del 50% y, en Madrid, del 100%. Esto, sumado a que el IRPF ha subido para las rentas más altas, es muy probable que derive en una fuga de contribuyentes hacia estas dos comunidades autónomas.

Según un informe de la Tax Foundation, la introducción del impuesto sobre el patrimonio con un mínimo exento de 1.300.000 dólares se traduciría en una caída del PIB del 4,9%, una contracción salarial del 4,2% y la disminución del stock de capital del 13,3%. En cambio, un mínimo exento de 260.000 dólares, generaría una merma del producto interior bruto y salarial adicional del 1%, mientras que el stock de capital se reduciría en 3 puntos porcentuales más. Aunque es evidente que el efecto del impuesto del patrimonio sobre el conjunto de la economía es negativo, tampoco hay que menospreciar el resultado que puede generar un diferencial en la aplicación del mínimo exento del impuesto como el que habrá entre Navarra y el resto del estado.

Conclusiones

Se puede decir que la reforma fiscal afecta a los navarros por diferentes vías:

(a) En primer lugar, a través de la no reducción de los tipos del IRPF que sí se implementó en la reforma fiscal central y también en algunas autonómicas. Esto se ha traducido en que, aunque no haya una subida efectiva de impuestos, las rentas más bajas tributen más en Navarra que en otras comunidades autónomas.

(b) En segundo lugar, por el no incremento de los mínimos personales y familiares, como sí ocurre a nivel estatal y en otras comunidades autónomas. De este modo, las familias con hijos se ven gravemente perjudicadas en Navarra.

(c) Por último, a través de la subida efectiva de los tipos impositivos. Dado que las reducciones personales y familiares ya no disminuyen la base liquidable, esto hace que muchas rentas tributen ahora a tipos impositivos superiores a los aplicados en 2015, independientemente de que luego se les apliquen deducciones en la cuota.

Los efectos de la reforma fiscal no tardarán en aparecer, ya que la movilidad de los trabajadores navarros ha aumentado y sus destinos preferidos son La Rioja, el País Vasco y Madrid. Además, personas con rentas más altas son las que mayor movilidad territorial tienen, de ahí que sea plausible esperar que, tarde o temprano, estas personas elijan regímenes fiscales más favorables, y especialmente si éstos se encuentran en las comunidades vecinas. Por otro lado, la reforma funcionará como barrera de entrada para atraer capital humano altamente cualificado.

En cambio, la no reforma fiscal para las rentas más bajas perjudica también a este grupo, ya que llegan a pagar hasta el doble de impuestos que en las comunidades fronterizas. De ahí que las personas que estén en busca activa de empleo prefieran aceptar un puesto de trabajo en otra comunidad, ya que con el mismo sueldo van a tener mayor renta disponible.

También se ha mostrado que las familias con hijos tienen un recargo fiscal importante frente a las demás comunidades autónomas. Sin embargo, son probablemente estas familias con hijos las que menor movilidad tengan, de ahí que el mayor peso de la reforma caiga sobre ellas. Por otro lado, el mensaje que encierra esta reforma es clave para los jóvenes que se están planteando formar una familia: tendrán mayores ingresos en País Vasco, La Rioja o Madrid.

Aunque se haya diseñado para recaudar más, la subida de impuestos se va a traducir en una menor renta disponible y, por lo tanto, en un menor consumo de bienes y servicios, lo que, a la larga, contrae la actividad económica. Es muy probable que la comunidad foral pierda declarantes y especialmente en los tramos de renta más elevados, lo cual va a traer consigo una caída de la recaudación. Por otro lado, el efecto inmediato será el de frenar la entrada de capital humano altamente cualificado. Por último, la reforma añade inseguridad jurídica, ya que da pie a un círculo vicioso: la subida fiscal va a generar más paro o contraerá el consumo, más paro o menos consumo significa menores ingresos, menos ingresos implica una mayor necesidad de financiación y más subidas fiscales, etc.

Publicaciones relacionadas