Castilla y León figura entre las comunidades autónomas de mayor exigencia fiscal, pero menor que Cantabria y Cataluña son las que más esfuerzo fiscal exigen a sus ciudadanos. Los que menos pagan son los residentes en el País Vasco, la comunidad que menos esfuerzo exige, según el «think tank» Civismo, que ha bautizado el 3 de julio como «Día de la liberación fiscal». Este laboratorio de ideas de orientación liberal ha dado a conocer esta semana un informe que indica que un español con un sueldo medio de 24.400 euros brutos al año dedica 184 días a cumplir con sus obligaciones tributarias con el Estado, es decir hasta el 3 de julio.
En concreto, pagaría 15.988 euros en impuestos, si bien en esa cantidad se incluyen las cotizaciones a la Seguridad Social. El informe se ha conocido en la misma semana en la que el presidente extremeño, José Antonio Monago, ha anunciado una nueva bajada en el IRPF, calculada en 50 millones de euros y después de que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, haya animado a las comunidades autónomas a seguir los pasos del Ejecutivo central.
Las cantidades medias que tributan los ciudadanos difi eren en función de la comunidad autónoma en la que lo hagan, de modo que hay una horquilla de nueve días de diferencia entre la autonomía con menor esfuerzo fiscal (País Vasco) y las de mayor esfuerzo fiscal (Cantabria y Cataluña). Esos nueve días suponen 737 euros a un contribuyente medio, debido principalmente a las diferencias en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), aunque también en el IRPF, en el impuesto de circulación y en el denominado céntimo sanitario. Debido a su régimen foral, los vascos pagan de media 468 euros menos en el IRPF, lo que les permite llegar a su particular «día de la liberación fiscal» el 28 de junio, cinco fechas antes que la media de los españoles, mientras que los navarros tardan tres días menos que la media al pagar 181 euros menos por IRPF.