La mal llamada tasa Tobin es el impuesto a las transacciones financieras que acaba de sacar adelante el gobierno de Pedro Sánchez. Un impuesto que grava con el 0,2% la compra de acciones de empresas españolas con una capitalización bursátil de más de 1.000 millones de euros, y con el que el gobierno español pretende recaudar hasta 850 millones de euros. Se trata del impuesto es clásico del que tiran muchos gobiernos precisamente para aumentar su recaudación. Eso sí, hay países que han tenido que eliminar ese impuesto porque ha provocado la huida de capital. Un claro ejemplo es el de Suecia, pero el impuesto no duró mucho tiempo porque fue un fracaso para la economía del país.

Informe: Impacto económico del absentismo laboral
Cada día 1,5 millones de españoles no acude a su lugar de trabajo, con un impacto en el PIB que supera el 3%. El absentismo laboral en España se ha consolidado como un fenómeno masivo, con un fuerte impacto económico y social. Según el nuevo informe de la Fundación...