John Müller, director adjunto del diario El Mundo, afirmó en Pamplona que “el Gobierno tiene que ser la referencia la prima de riesgo y no al revés”, en referencia al presidente Rodríguez Zapatero, que estableció que esta cifra iba a ser “su marcapasos”. En opinión de Müller, el Gobierno debe ser quien marque las pautas y dé tranquilidad, “no bailar al son de los mercados sino hacer las cosas bien”. En la conferencia ‘Tras las elecciones, ¿se atreverán?’, el periodista insistió en que “no es justificable la histeria que ha surgido en torno a la prima de riesgo”, porque estamos pagando un tipo medio del 3,5% y descontando la inflación se queda en un tipo real de menos del 1%.
Por el contra Quizá por esto, adujo el director adjunto de El Mundo, Rajoy no quiere un traspaso precipitado, como le reclaman desde su partido. “Probablemente Rajoy se dará cuenta de que la mayoría absoluta no le debería enloquecer y piense en un pacto con CiU con miras a la mayoría relativa que podría tener dentro de cuatro años”, explicó, aunque el periodista advirtió de que el precio nacionalista puede ser muy elevado: el concierto económico. “En este sentido –apunta Müller–, Rajoy se tiene que dar cuenta de que no ha habido un vuelco electoral, sino un reparto masivo de los votos de izquierdas”. De acuerdo con sus tesis, esto modulará la intensidad de las reformas, porque los desencantados podrían volver en forma de votos o protestas.
Sin embargo, para el chileno es importante señalar que, a pesar de los recortes, los electores “reaccionan positivamente cuando se les dice la verdad”, como prueban los casos de Cataluña y Castilla-La Mancha. El columnista de El Mundo indicó que la losa de la que parte el próximo presidente es muy grande: “Se le conocerá como el campeón del paro, es muy probable que en verano el número de desempleados alcance los 5 millones y medio y no empiece a bajar hasta finales de 2012”.
Para Müller, los niveles actuales de paro son un problema moral, por lo que la reforma laboral debe ser prioritaria y tratar temas como la multiplicidad de contratos (hay más de 46 tipos distintos), la dualidad del mercado y el subsidio, que desincentiva el esfuerzo. En su opinión, “es muy improbable que Rajoy persiga una ley de huelgas, porque tanto al Gobierno como a los sindicatos les interesa que haya paz social, pero sí quitará liberados”. En cambio, Müller apuesta porque combatirá las barreras comerciales absurdas con estándares. En este apartado, citó el caso de una empresa tecnológica cuyos mayores problemas estaban en el campo de los embalajes; la clave: “tenía que mantener diecisiete departamentos de reciclado, uno por cada norma autonómica.
En cuanto a otra de las prioridades de Rajoy, el equilibrio presupuestario, Müller cree que no queda margen para privatizar, al menos ganando dinero, por lo que habrá que recortar unos 24.000 millones en 2012 y otros tantos el próximo año. “Además, quedan facturas en el cajón: la prueba son las pymes y autónomos que han quebrado porque la Administración no les paga”. El periodista pone sus esperanzas en “una de las generaciones mejor preparadas”. “Muchos están volviendo a estudiar y, en cuanto liberemos sus fuerzas, la creatividad se hará un hueco en el mercado”, apuntó.
Müller ve varios puntos para confiar en el futuro, como que muchas empresas que dependían del Gobierno han sabido buscar contratos en el exterior (por valor de 15.000 millones en 2011) o que las exportaciones crecen a un ritmo del 18%. Aunque recordó que tenemos por delante una recesión. De acuerdo con sus opiniones, los españoles tienen que producir mejor y, cuando devuelvan sus deudas, podrán volver a consumir, lo que provocará la recuperación del mercado interno. “Hay que cambiar la percepción de que la economía depende del gasto”, sentenció.