Medidas liberalizadoras como solución a las penurias económicas españolas

Fernando Eguidazu, vicepresidente del Círculo de Empresarios y ex miembro del Comité de Mercados Financieros de la OCDE, aseguró en Pamplona que “la economía navarra está más enganchada a Europa que a España”. En un encuentro con ciudadanos organizado por Civismo, el ‘gurú’ afirmó que “Navarra puede aprovecharse de ser el último vagón de la locomotora europea en vez del primero de la española”.

En opinión de Eguidazu, esto puede lograrse gracias al buen desempeño de la economía foral y a la fuerte implantación de empresas extranjeras en Navarra, que son las mejores embajadoras para atraer más capital. “Las empresas ya no invierten en países, sino en regiones”, recordó. Para el experto economista, la economía foral destaca por haber sido la primera comunidad autónoma en salir de la recesión, gracias a su baja exposición al sector de la construcción, su potente industria y un convenio económico que le otorga autonomía.

En cuanto a sus debilidades, recordó que el principal talón de Aquiles de Navarra es su escasa población, que la excluye de poder realizar actividades más ligadas al sector servicios. Sin embargo, su dinamismo la convertirá en polo de atracción para los inmigrantes cualificados, lo que aumentará su productividad. Por ello, recomendó crear un clima favorable a las empresas, con un sistema fiscal que incentive el ahorro y la inversión y mantener una administración regional pequeña y barata.

OTROS CINCO AÑOS MALOS

Durante su intervención, Eguidazu también se refirió a la economía española, y pronosticó que “los próximos cinco años serán malos, pero saldremos adelante si la economía se liberaliza”. “Cada vez que a las empresas se les ha soltado el bozal, España ha salido adelante”. Y puso como ejemplos el boom de los años 60, la entrada en la Unión Europea y la adopción del euro.

Al igual que entonces, “lo sensato sería que el Gobierno dejara de hacer apuestas equivocadas y sentara las bases que permitan que las empresas puedan descubrir nuevas oportunidades”, afirmó el experto. “Hace veinte años nadie imaginaba que España sería referente mundial en ropa, construcción y banca”.

«La economía navarra está más enganchada a Europa que a España» 

Fernando Eguidazu

Sobre el futuro a corto plazo, Eguidazu señaló la crisis de la deuda como el problema más urgente, ya que este año “toca refinanciar 150.000 millones de euros y habrá que emitir 40.000 más, en un contexto en el que España no inspira la suficiente confianza en los mercados internacionales”. Además, recordó que buena parte de esta deuda tendrá que ser solventada en abril, coincidiendo con la publicación de los datos de ejecución presupuestaria del primer trimestre de 2011, “que si son negativos complicarán la operación”.

Eguidazu se refirió también a la importancia de la reforma laboral, del sistema financiero y a una devaluación interna. “Al final los sindicatos han de entender que es necesaria una mayor austeridad salarial para que España gane en competitividad”.

En cualquier caso, “ni siquiera acometiendo todas las reformas necesarias está garantizado que crezcamos al ritmo suficiente que permita crear empleo y reducir el paro, pero hacer las cosas bien es la única forma de que España deje de competir con botas de alpinismo y se sitúe en la parrilla de salida con unas zapatillas deportivas”, sentenció.

Para Eguidazu, el problema de fondo es el estancamiento que la economía española presenta. “Da igual decrecer un 0,1% del PIB que crecer un 0,6%, porque hasta el 1,2% no se crea empleo, y sólo por encima del 2% puede bajar el paro”. Además, la economía española “presenta una estructura preocupante, porque frente a 14 millones de trabajadores directamente productivos, hay 4 millones no directamente productivos (funcionarios y personal dedicado a la sanidad, etc), casi 5 millones de parados y 8 millones de pensionistas”, apuntó el economista.