El think tank Civismo ha calculado que el fracaso de la rebaja fiscal que pretendía llevar a cabo el Gobierno foral se va a traducir en que los navarros cobrarán hasta 350 euros menos.
La decisión del PSN de presentar enmiendas a la totalidad al proyecto que había diseñado UPN, sumada al rechazo del resto de la oposición menos el PP, ha dejado a Navarra sin reforma fiscal integral al menos en la presente legislatura. En cuanto al IRPF, el Ejecutivo foral planteaba una reducción en todos sus tramos que se aplicaría en dos años (2015 y 2016). Sin modificaciones, los navarros van a pagar un IRPF más alto que el resto de los Españoles. El Estado va a aprobar un tipo máximo del impuesto del 45%, mientras que la Comunidad foral se mantendrá en el 52%.
Civismo califica ese 7% de diferencia como un “castigo”. “Al no eliminarse el recargo autonómico sobre el IRPF que se empezó a aplicar en Navarra en 2012, se castigará a las familias con hijos a pagar más impuestos que en el resto del Estado”, afirma Cristina Berechet, jefa de investigación del think tank. Éste indica que un navarro con un sueldo medio de 24.400 euros al año y dos hijos a su cargo “cobrará 146 euros menos que un riojano con el mismo sueldo bruto”. Civismo toma La Rioja como referencia como comunidad vecina. “Si los sueldos son iguales pero a los navarros les retienen más, cobrarán menos”, explica Berechet.
En la misma línea, desde Civismo afirman que un contribuyente navarro con dos hijos a su cargo cobrará desde 73 euros menos si su sueldo bruto es de 15.500 euros, a 214 si gana hasta 40.000 euros. “Así mismo, un navarro sin hijos y con una renta de 40.000 euros brutos pagará en IRPF 350 euros más que un riojano”, añaden.
En opinión del presidente de Civismo, Julio Pomés, Navarra pasa a “disponer el peor régimen fiscal de España y de casi toda Europa, lo que es una mala credencial para atraer inversiones. Es el camino hacia la miseria”.
