Esperanza Aguirre ha entregado este martes a Albert Boadella el premio Sociedad Civil, que concede cada año el think tank Civismo. Un galardón que reconoce la acción del dramaturgo en defensa del ejercicio de la libertad individual y de una sociedad civil más activa.
Unos minutos antes de recibir el premio, Boadella ha valorado para Libertad Digital lo sucedido en el debate sobre el desafío separatista catalán y la posible consulta. El actor ha afirmado que ahora «todo depende de la actitud del gobierno». Pero «después de dos generaciones educadas en el odio a todo lo español los resultados no pueden ser para nada positivos».
El galardón
La presidenta del PP madrileño, que ha sido interpelada por dos personas al grito de «voy a aparcar el coche, que lo tengo en el carril bus» al inicio de su discurso, ha reconocido la labor de Boadella como «defensor de la libertad en Cataluña».
Aguirre ha explicado que «la libertad tiene hoy tiene un enemigo mortífero que es la dictadura de la corrección política, que es tan fuerte que los políticos y los que se llaman intelectuales pocas veces dicen lo que realmente piensan». Algo que no ocurre con Boadella, ha explicado, ya que el dramaturgo «ha plantado cara a la corrección política» y además » muchas veces nos ha invitado a gritar viva España cuando ni los que tendrían que hacerlo lo hacen».
Tras la intervención de Aguirre, Boadella ha recibido el galardón, y en su discurso ha realizado una defensa de «una cultura libre e independiente de los signos políticos dominantes» . El actor ha criticado a todos los artistas «que asumen las tesis de la masa». Ha explicado que «su gremio está lleno de teología sindicalista» y ha cuestionado si «han visto ustedes algún artista defendiendo la aplicación de la ley, el orden público, el libre mercado…».
Para Boadella , se producen en estos días en el mundo del arte «actitudes del pasado tan indignas como el escapismo intelectual de mi gremio. Ante hechos tan graves como el terrorismo, se han sumergido en el pensamiento único».
Boadella también ha querido reiterar «su opinión ante este masivo exterminio del sentido común» que se da en Cataluña donde le «toco vivir muchos años en una comunidad que fue pasto de una ilusoria ficción».
No es una comedia
En declaraciones a LD, Boadella también ha valorado lo sucedido en el debate sobre el desafío separatista catalán. Llevándolo a su territorio, Boadella ha dicho que «en el congreso se ha escenificado una representación» y que «podía parecer que era comedia pero no lo es ya que se ha contaminado a la ciudadanía».
El dramaturgo ha afirmado que ahora «todo depende de la actitud del gobierno». Pero «después de dos generaciones educadas en el odio a todo lo español los resultados no pueden ser para nada positivos».
