La cita de Austin O’Malley: “Al recaudar impuestos y esquilar ovejas, es bueno detenerse cuando se llega a la piel, algo que depende de los políticos” debiera ser valorada en La Moncloa. Aunque el Gobierno haya decretado el ‘éxito total’, ya son mayoría los ciudadanos que han tomado conciencia de que la viabilidad de muchos negocios está cuestionada. La elevada inflación debiera haber llevado a deflactar la tarifa, pero no ha sido así. El Gobierno ha preferido recaudar más, aunque colapse la actividad productiva.

La obsesión por conseguir el voto está llevando a comprometer el futuro económico de la nación. Al Ejecutivo no le han importado los avisos del Banco de España, la AIReF y otras instituciones independientes, ante la subida de las pensiones y las cotizaciones sociales. La renta de los españoles es la que más se ha desplomado en Europa desde 2019, con una pérdida de 1.700 euros por habitante. Pero para el populismo, lo único que cuenta es lograr el poder a cualquier precio, mientras que se dispare la deuda y el desempleo le traen al pairo.

El Ejecutivo, tras satanizar públicamente a empresarios ejemplares en la creación de valor y de empleos, se arroga el derecho a requisar la propiedad a unos extremos confiscatorios. El miedo que suscita el poder de control que exhibe el Ejecutivo ha enfriado la ilusión por invertir y emprender en España.

Somos muchos los españoles que soportamos mal el sarcasmo del Gobierno, cuando pretende hacernos creer, que sabe mejor que nosotros mismos, lo que se puede hacer con nuestro dinero. El próximo martes 11 de abril la Agencia tributaria abre una campaña de la renta, que pretende aplicar la mayor subida de impuestos de su historia. Sin embargo, hay Comunidades autónomas, que mediante una política de contención del gasto, son menos exigente con el contribuyente en la parte de los tributos que de ellas depende.

Se han escogido a los solteros sin hijos que solo percibe Rendimientos del Trabajo Personal (RTP) de 20.000, 40.000 y 90.000 euros, poder comparar las cuotas líquidas que deberán satisfacer a Hacienda. En los RTP de 20.000 euros, quienes pagan más son Bizcaia (4.799€), Guipuzkoa (4.799€) y Álava (4.786€). Los que pagan menos son La Rioja (4.085€), Madrid (4.103€) y Canarias (4.135€).

Si vamos a los RTP de 40.000 euros las que abonan mayores cuotas líquidas vuelven a ser los tres territorios forales vascos: Bizcaia (10.954€), Guipuzkoa (10.954€) y Álava (10.907€). Los que la que satisfacen menos son Canarias (10.232€), Madrid (10.247€) y Castilla-La Mancha (10.352€).

Respecto a las rentas altas de unos RTP de 90.000 euros, quienes tienen cuotas líquidas más altas son: la C. Valenciana (32.554€), Extremadura (32.471€) y Cantabria (32.184€). Las que pagan menos son Madrid (30.781€), Castilla-La Mancha (31.150€) y Baleares (31.191€. ). Si desea conocer la cuota líquida que pagaría en otra comunidad con garantías de privacidad, le sugiero que acuda a la web www.calculadorafiscal.es

El ciego populismo del Ejecutivo no quiere ver que está propiciando el traslado de empresas, del capital físico y del intelectual a Portugal. La torpeza de poner barreras a las compañías que desean marcharse, no solo es inútil dentro la Unión Europea, sino además perjudicial, porque disuade a que vengan empresas de fuera.

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